Luego de identificar alimentos agresores para el intestino comienza una de las cosas más lindas de la nutrición mirada funcionalmente donde por medio de sustancias simples y de fácil acceso podemos ayudar a reparar la mucosa y la barrera intestinal conjunta a la incorporación de alimentos que nutran y no generen mayor daño.
A modo resumen y que a mi entender no deben dejar de evaluarse son:
- Nutrientes aislados cómo vitminas A, D, C y del complejo B. Magnesio, Zinc y Omega 3 que actúen revirtiendo deficit, reparando y desinflamando.
- Polifenoles concentrados: con efecto antioxidante y prebiótico sin revivir síntomas.
- Glutamina: reparador de la barrera intestinal.
- Infusiones con función digestiva como melisa, hinojo, regaliz y boldo.
- Fibra soluble: lino molido es mi elegido sobre todo en alteraciones en la motilidad intestinal.
- Aloe vera: gran aliado de la mucosa digestiva para repararla
- Aceite de menta: para bajar dolor abdominal y de uso tópico también.
- Probióticos: con cepas reconocidas en concentraciones óptimas y también fermentados salvajes cuando no hay síntomas agudos ayudan mucho a mejorar.
Claro que hay más y no todos sirven para todos ni para los mismos síntomas. Lo mismo que hay pasos puntuales que seguir y no tomar todo junto.
Pero es hermoso conocer que lejos de la medicación ( aunque en muchos casos sea necesaria al menos por un tiempo) y de los nutroterapicos convencionales podemos combinar sustancias, infusiones y suplementos para volver a darle vida a un intestino dañado y a sentirnos mejor.